1957
El ritmo: cultura y contracultura
Selección musical por JGC
¿Atajo musical?
Si eres de los que van al grano o temes perder tiempo, encontrarás la selección de canciones enlazadas a YouTube y un reproductor de Spotify justo al final.
Una selección basada en parámetros de calidad y relevancia, no en tendencias masivas.
Aún no hemos completado la introducción detallada para este año, pero algunas canciones ya comienzan a perfilarse como parte de la selección definitiva.
Lo que escucharás a continuación forma parte de un proceso de preselección cuidadosamente curado: piezas con valor histórico, belleza artística o resonancia cultural, que con alta probabilidad integrarán la lista final.
La introducción llegará pronto, pero mientras tanto, la música ya ofrece una puerta entreabierta a aquel año. Si deseas proponer alguna canción relevante que creas que falta, puedes hacerlo mediante el botón de contacto ubicado en la esquina superior de esta página. Toda sugerencia documentada será bienvenida y agradecida.
Bogart y el último brindis en blanco y negro
En enero de 1957 moría Humphrey Bogart, dejando atrás no solo su inconfundible silueta de gabardina y cigarro, sino todo un modo de habitar el cine. Su despedida marcaba el ocaso de una era: el blanco y negro del viejo Hollywood comenzaba a difuminarse, y con él, cierta manera de decir adiós sin decirlo del todo. Casablanca ya no era un lugar; era un eco, una niebla persistente, una promesa que nadie terminaría de cumplir.
En el Rick’s Café Américain, el humo de los cigarrillos no solo velaba los rostros, sino también las lealtades. Bajo los acordes inmortales de As Time Goes By, cada mirada era una jugada de ajedrez, cada brindis un riesgo calculado. Afuera rugía la guerra, pero dentro de aquel bar —microcosmos de un mundo al borde del abismo— aún se negociaba con palabras, con silencios, con canciones. Bogart, como anfitrión de ese santuario, encarnaba al hombre que había aprendido a caminar entre sombras: cínico por fuera, herido por dentro, fiel a un código que el tiempo haría incomprensible.
Y el tiempo, en efecto, cambió. A finales de los años sesenta, el mundo ya no se partía en dos como en aquella bisagra de los treinta y los cuarenta, sino en bloques tensos, envueltos en sonrisas diplomáticas que ocultaban misiles. La Guerra Fría era también un Rick’s: un espacio de penumbras donde las alianzas se tejían y se rompían sin anunciarse. Si en Casablanca todo concluía con “Presiento que este es el comienzo de una hermosa amistad”, el nuevo orden global ofrecía su versión torcida: pactos entre potencias cuya única confianza era el miedo mutuo.
El mundo que se avecinaba —más ruidoso, más veloz, más incierto— estaba hecho para otros rostros. Pero la mirada de Bogart quedó ahí, suspendida, como quien sabe que el futuro viene… pero aún no ha llegado. Como Rick, como aquel Hollywood que cerraba estudios y apagaba estrellas, Bogart fue el último pirata de un tiempo en que hasta la derrota podía tener estilo.
FORTRAN: El lenguaje que escribió las ecuaciones del futuro
En 1957, mientras el rock and roll sacudía los parlantes con "Jailhouse Rock" , la ciencia escribía su propia revolución en mayúsculas: FORTRAN (FORmula TRANslation), el primer lenguaje de alto nivel, nacía para traducir fórmulas matemáticas en instrucciones de máquina. Ya no haría falta escribir en ensamblador , ese código críptico y laborioso; ahora, las ecuaciones fluían casi como en papel, pero ejecutables.
IBM lo concibió como un puente entre la abstracción humana y la precisión binaria. Su nombre lo decía todo: era un traductor, un intérprete entre dos mundos. Y aunque al principio se escribía en MAYÚSCULAS (como los gritos de Elvis), con el tiempo adoptó la flexibilidad de las minúsculas… igual que la música pasó del shouting al susurro del jazz cool.
Nota: Todos los títulos que aparecen a continuación están enlazados a YouTube, una plataforma que valoramos mucho. Te permite escuchar cada canción a tu ritmo, una por una. Puede llevar tiempo, sí, pero tiene su encanto, como revolver una vieja colección de vinilos. Y si prefieres simplemente dar play y disfrutar toda la selección sin pausas, al final de esta página encontrarás una lista en Spotify con todos los temas reunidos.